El amor es complicado. No siempre podemos poner en manifiesto el porqué amamos a alguien o por qué lo hacemos, pero buscamos ese sentimiento (y mucho mejor si nuestras relaciones de amor son recíprocas). Las marcas trabajan esa magia de la relación con nosotros también. Es como conocer a un potencial candidato –tiene que conectar con nosotros, hacernos felices y mantenernos cautivados por largo tiempo.
La fase de cortejo
Ahora más que nunca, nuestra atención es difícil de capturar e incluso es más difícil de mantener. Esas marcas que nos cautivan se han convertido en los gurús de las relaciones cuando se trata de capturarnos y mantenernos interesados –a pesar de las distracciones como el ruido de los medios sociales y las maratones sin parar de serie.
Es aquí en donde entra a tallar el contenido. El buen contenido –y mucho más importante en video– es una fuerza poderosa que las marcas necesitan aprovechar, ya sea que lo creen ellos mismos, o lo organicen de forma convincente. El uso de un video es tan importante para el éxito de una marca porque es un medio que puede capturar y conectar con nosotros en todas las formas. Por medio de la visión, sonido y movimiento.
Una vez que las marcas nos capturan con contenido que genera una conexión significativa, entramos realmente a la fase de cortejo. Podríamos buscar inspiración, sentirnos bien o estar en cualquiera de los momentos de contenido universal que definen por qué nos conectamos online. Pero el resultado es siempre el mismo: ahora es una relación, y el contenido que nos ofrece la marca a partir de este punto decidirá si queremos llevar esa relación al siguiente paso.
Entonces, una vez que la marca tiene nuestra atención, tienen que mantenernos interesados. La mejor forma es darnos más de lo que nos encanta. El secreto de ello es saber saber exactamente lo que nos genera interés.
La data es básicamente como salir con alguien
En cualquier relación, cuanto más sepamos de cada uno, mejor comprenderemos las necesidades del otro. Para las marca, esto significa entender nuestros caprichos, gustos, y pasiones o incluso cosas simples como nuestras momentos preferidos del día. La data le brinda a las marcas la oportunidad de conocernos un poco mejor de lo que nos conocemos –con solo prestar atención.
Aprender más sobre nosotros le brinda a las marcas las herramientas para hacernos más felices. Las marcas que observan cómo nos gusta participar con ellas, y prestan atención a cómo usamos sus productos o servicios pueden comenzar a anticipar nuestros deseos o problemas. Esto les permite abordar nuestros problemas –algunas veces mucho antes de darnos cuenta que los tenemos.
Ahora somos inseparables
Una ves que la marca ha retenido nuestra atención, la relación pueden pasar a otro nivel. Nuestros dispositivos móviles nos permiten llevar a nuestras marcas más queridas a donde vayamos, están a nuestra disposición y podemos llamarlos cuando es necesario. Pero para llegar a este nivel, las marcas tienen que vivir y respirar mobile.
Es difícil exagerar cuán estrecha es la relación que tenemos con nuestros teléfonos. Según estudios, el 49% de las personas señalan que usan sus teléfonos antes de siquiera levantarse de la cama en las mañanas. Tu teléfono es la extensión de quién eres y de lo que te interesa. Tanto así que nos definimos así mismo como una «persona de IPhone» o una «persona de Android». Debido a que lo móvil es tan importante para quiénes somos, las marcas tienen que optar por lo móvil. No solo ser accesible en dispositivos móviles, sino entrelazar lo móvil a través del tejido de cómo ellos se relacionan con nosotros.
Esta relación móvil puede ser con una aplicación de tu marca favorita, o incluso podría manifestarse con su próximo video móvil de 360°. No importa la forma en que suceda la relación, es una parte no negociable del trato. Si una marca no puede mantenerte feliz con una excelente experiencia móvil, buscarás en otro lugar, y lo harás rápido. Lo móvil es tan importante para lo que somos hoy en día como para que las marcas solo nos conozcan a medio camino.
Tengamos un diálogo abierto
Incluso las mejores relaciones necesitan seguir evolucionando, y nuestra relación con las marcas no es diferente. ¿Queremos convivir con una marca que nos invite a hacer comentarios, o estamos satisfechos con una que no quiere escuchar lo que decimos? Abrir líneas de comunicación entre una marca y los consumidores genera mejores relaciones y una mayor innovación enfocada en el consumidor. Tiene que ser un dar y recibir en donde intercambiamos nuestros comentarios e información por un mundo lleno de mejor contenido, un servicio al consumidor sin paralelo y productos diseñador exactamente como somos.
Nunca estamos felices cuando nuestras relaciones personales son unilaterales, y esto es igualmente cierto en las relaciones con las marcas. El escuchar nuestros comentarios les ayuda a crecer, pero responder a ellos gana nuestra lealtad de por vida.
Enamorase de una marca que es leal a ti y a quién eres –que comparte tus valores personales, refleja tu verdadero yo y te brinda un intercambio valioso– es el felices por siempre que todos estamos buscando.
Este artículo fue traducido de Mashable por Staff Digital. Somo una agencia de marketing digital que se enfoca en Diseño de Imagen Corporativa y Branding. Nos esforzamos por crear marcas únicas y humanas que creen conexiones con las personas. Si deseas saber sobre nosotros, no dudes en contactarnos.